El pasado mes de enero IMPLICA recibió el encargo de uno de sus clientes para la búsqueda de una nave industrial de unos 3.000m2 para trasladar y ampliar su actividad productiva dentro del Vallès Occidental. En estos momentos no hemos encontrado la nave que cubra sus necesidades después de una búsqueda continua y activa y habiendo contactado con otros profesionales que nos pueden ofrecer producto alternativo.

La combinación de las variables superficie, ubicación y cumplimiento de los requisitos normativos ambientales y de actividades, aplicadas a la supuesta oferta disponible existente, nos ofrece muy pocas alternativas. Hemos estudiado y visitado un conjunto relevante de naves y detectamos que una parte significativa del parque actual está obsoleto sea por antigüedad o sea por la dificultad en el cumplimiento normativo vigente.

Esta es una paradoja más del mercado inmobiliario. A pesar del exceso de producción en la época de la burbuja inmobiliaria y sumando el factor del cierre de empresas durante la crisis y por tanto más disponibilidad de naves industriales, nos encontramos a fecha de hoy que existe una disociación entre el producto disponible y su funcionalidad real.

Inversores inmobiliarios! Tienen una interesante oportunidad en el mercado de naves industriales para dar respuesta a esta demanda del mercado no atendida, siempre y cuando, sus tasas de rentabilidad expectante se puedan cubrir con unos alquileres que continúen haciendo competitivas las empresas industriales.

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