El pasado mes de julio, el Parlamento de Cataluña aprobó por unanimidad la ILP que ha dado lugar a la Ley 24/2015, de medidas urgentes para afrontar la emergencia en el ámbito de la vivienda y la pobreza energética. Esta Ley prevé diferentes medidas para evitar los desahucios y las situaciones de riesgo de exclusión residencial, como por ejemplo la aplicación del alquiler social obligatorio, la dación en pago o el realojamiento inmediato cuando sea necesario por parte de las administraciones.

Ante la necesidad e interés del Ayuntamiento de Banyoles de dinamizar el parque vacante y asegurar el acceso a la vivienda en el conjunto de la ciudadanía, desde GMG elaboramos una metodología específica que combina el tratamiento y el análisis del padrón, el catastro y los consumos de agua. Este método ha permitido cifrar y localizar las viviendas vacías en el conjunto de la ciudad, y concretamente, aquellos de propiedad de entidades financieras y sus filiales inmobiliarias, los fondos de inversión y las entidades de gestión de activos.

Cabe decir que el cruce de los datos a menudo no es automatizado y por tanto se requiere de un trabajo individualizado de la información, de una depuración de los datos y de un trabajo de campo para corroborar los resultados obtenidos. Asimismo, se ha utilizado el SIG para la localización de estas viviendas para definir zonas de mayor o menor concentración de viviendas vacantes y priorizar las actuaciones a llevar a cabo en el municipio así como poder tener un seguimiento continuo en el tiempo del estado de desocupación.

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